Salto sobre fuego

Este deporte, como ya dijimos casi extinguido, tiene lugar una vez al año, prácticamente por toda la península ibérica, incluidas zonas urbanas. El intento de erradicarlo ha resultado baldío. Tiene lugar exactamente las noches del 24 de Junio de todos los años. Teóricamente conmemora el solsticio de verano y está relacionado con las radiaciones solares y cambios climáticos. El fuego o fogata en el País Vasco consiste en un "tótem central" o tronco de árbol rodeado de ramas menudas en la base y troncos medianos apoyados contra el tronco principal. Es, en cierto sentido, una tienda india. En la cúspide suele colgarse un muñeco o figura de trapo.


En la Edad Totémica la quema de un tótem significaba la destrucción de poder de una tribu o un clan rival. El indio vasco primitivo extraía la fuerza o espíritu del enemigo quemándolo en la hoguera. Una vez que el enemigo se convertía en cenizas y el fuego de la hoguera lo permitía, se saltaba por encima a caballo. Cuando la hoguera se había convertido en cenizas, se pisoteaban las brasas en algunos casos con los pies desnudos, tradición que todavía se conserva en algunos lugares de Asturias.

El nombre de este deporte o festejo fue modificado con la introducción del cristianismo en la península ibérica y hoy día se conoce por la Noche de San Juan Bautista. Se celebra en España, Portugal, Finlandia, Noruega y Suecia. Este deporte nos habla del final de la cultura india, no por una glaciación sino por un aumento de temperaturas que fundía las ceras y grasas naturales de las pieles de animales con las que estaban hechas las tiendas.

Según los historiadores la glaciación en el País Vasco hizo que el vasco se refugiara en cuevas. Pero técnicamente una glaciación extrema, hoy día, produciría una emigración hacia el Sur y el Norte de Africa. La glaciación produjo una nueva fauna, mastodontes, renos etc. Una glaciación extrema en fase recesiva con picos nevados seguidos de deshielos fuertes producía riadas y desbordamientos de los ríos.

Hubo una glaciación pero el final de este período no es considerado un calentamiento global. En períodos extremos de sequía, el vasco encuentra agua en acuíferos y accede a ellos a través de cuevas subterráneas. Ya sea por glaciación o por sequías, la cueva se convierte en punto de reunión de la tribu o el clan.

El número de pobladores de un clima extremo tenía que ser necesariamente bajo y por ello, las cuevas encontradas son escasas.

El final de la glaciación produjo una nueva emigración hacia el Norte. El poblador vasco y el ibérico acostumbrado a vivir entre glaciares entre treinta y sesenta grados bajo cero emigró a zonas frías y se estableció en Finlandia, Noruega y Suecia. Cuando terminan los períodos de sequía extremos, el poblador vasco pone rumbo hacia lugares desérticos en el Norte de Africa. Esta podría ser la razón de los lazos que unen a España con otros países bálticos y africanos.